El humor es una herramienta que nos sirve para llevar mejor una realidad que nos asusta. Esta mañana, nos levantamos con una de esas realidades, más de 300 sacerdotes acusados de abusos sexuales en Pensilvania y lo más escalofriante es que posiblemente el Vaticano tenía conocimiento de estos hechos desde 1963... ¿estamos locos?
Y de ahí nuestras rameras de Babilonia,una obra muy incorrecta muy sutil en ocasiones y transparente en otras, donde se manejan datos reales de una Iglesia que en ocasiones, ha sido más una franquicia de pecados que un templo de perdón y recogimiento.
Obra coral de mujeres, donde se empondera al genero femenino por todas las ostias que ha recibido de la iglesia durante décadas:que si pecadora, puta,pervertidora, que si tienes que ser una buena mujer sometida y disciplinada, que si zorra...y demás lindezas que aparecen en textos escritos por la iglesia o por sus representantes aquí en la tierra.
Ramón Paso es el director de esta declaración de valores y de "hasta aquí hemos llegado", tiene a sus espaldas más de una veintena de montajes teatrales como director, dramaturgo o ambas funciones a la vez, entre los montajes podemos destacar: Matadero 36/39, La Ramera de Babilonia, Retablo pánico, Papá es Peter Pan y lo tengo que matar, Huevos con amor, El síndrome de los agujeros negros, Jardiel en la checa, las adaptaciones de los clásicos Tiempos difíciles, Peter Pan y Eloísa esta debajo de un almendro y las revisiones actualizadas Perversión Medea y Usted tiene ojos de mujer fatal...en la radio.
Las maravillosas actrices Ana Azorín, Inés Kerzan, Ángela Peirat y Elisa Pelayo, son las que nos llevan de la mano por los vaivenes de la historia religiosa que tiene muchos claro oscuros sin resolver y con la noticia con la que nos hemos levantado esta mañana, esta claro que son más oscuros que claros.
Sin duda, una obra mordaz y locuaz que no hay que perderse.