No sabemos que hacer, ni que decir, ni como podemos animarle/a para que se encuentre mejor. En este momento en el que vivimos, parece que todo te tiene que ir perfecto, el trabajo, la pareja, los amigos... Las miserias, las penas, las tristezas no están de moda y no queremos hablar de ellas. No se trata ni mucho menos de victimizarse, se trata de mostrar una realidad que ocurre más de lo que pensamos y que se escapa de nuestro control, aparece sin más y se queda instalada en tú vida una temporada, habló de la DEPRESIÓN. Como bien sabréis los entendidos en la materia hay muchos tipos pero yo quiero hablaros de la Depresión Reactiva, aquella que depende de un suceso ocurrido al margen del sujeto en cuestión y que no es predecible de ninguna de las maneras. 

Actualmente, la estoy viviendo en mis carnes y un familiar muy cercano también,por sucesos diferentes pero con el mismo resultado. Cuando alguien esta en este proceso no puede ver más allá de la propia oscuridad que le ha llevado allí y que le hace sentir, inservible, poca cosa, inútil, un fracaso, no puede hacer las cosas que hacia antes, no tiene ilusión, no puede ver que las cosas puedan mejorar en el futuro y sobretodo no tiene ni puta idea de cuanto tiempo va a tener estas sensaciones.



 Las personas de alrededor solo pueden hacer una cosa, tener paciencia por que la actitud y el tiempo son las únicas cosas que pueden hacer que los que estamos en este momento vayamos mejorando.