El gran reclamo para ir a ver esta obra es saber cómo bien de adaptados están los momentos musicales. Y si en algún momento nos acordaremos de la Selma original que fue magistralmente interpretada por Bjork.

La adaptación de la película de Lars Von Trier del mismo título a esta obra realizada por Patrick Ellsworth es correcta, la historia sigue siendo sobrecogedora y Marta Aledo siendo la Selma española está sobresaliente. Considerada como un referente en la cinematografía contemporánea, que representa unos contenidos actuales y humanos como: la abolición de la pena de muerte, la inmigración, la sociedad capitalista y la obsesión por las cosas materiales, la fraternidad, la amistad, el amor, el perdón, la bonda, el ser humano en su mejor versión en estado puro.

Realmente,el trabajo de todo el elenco de los actores es inmenso,donde no solamente interpretan sino que cantan y bailan. José Luis Torrijo, Fran Calvo, Luz Valdenebro, Inma Nieto o Álvaro de Juana participan en crear este universo donde Marta Aledo se mueve entre la luz y la oscuridad...bailando. 

Mediante la escenografía nos llevan de la mano al universo de Selma en donde ella imagina un mundo menos "oscuro". Ella transita por ambos mundos en el que sueña e imagina, y en el que le ha tocado vivir. 

La obra es bella y dura, luz y sombra a la vez y el espectador incluso sale con la sensación de no saber si le ha gustado o no, sale también en su corazón con un poquito del mundo de Selma.

Aún estais a tiempo de poder verla en el teatro Fernán Gómez de Madrid.

 Que mejor manera de celebrar el teatro que llenado las salas!