Sinceramente, creo que sobre esta obra de teatro tan solo la clasificaría con una palabra:Terrible. 

Terrible el acto tan generoso que hacen todos los actores para llevarnos de la mano a ese portal de 3 metros en los San Fermines del 2016. Terrible acierto en el montaje de un espectáculo brutal y demoledor que incrementa la ya abultada carpeta de los sucesos más negros de este país.
La obra contada a partir de las transcripciones del juicio realizado a La Manada tanto desde el punto de vista de los acusados como de la demandante.

Fascinante la conmovedora interpretación de María Hervás frágil, desconcertada y aterradora te pone los pelos de punta. Increíble cómo nos hacen creer Martiño Rivas, Ignacio Mateos, Álex García, Raúl Prieto y Fran Cantos con el simple movimiento de sus cuerpos, que estamos ante La Manada.

Una hora y veinticinco minutos en donde los agresores no son únicamente estos cinco impresentables sino también la justicia española que volvió a meter a esta chica de 18 años de nuevo en ese portal.

Se me plantea un debate, ¿por que ir a pasarlo mal al teatro? Por qué al igual que los clásicos (Lope, Calderón...) contaban sus historias y permanecieron a lo largo de la historia estos hechos de la España más oscura también permanecerán. Por que marcó un antes y un después y nos atrevimos a salir a la calle a decir:Yo si te creo y basta ya!

Muy recomendada, y muy agradecida de que haya un montaje tan veraz,inquietante y dolorosamente verdadero como Jauría.